¿Cómo es una sesión de biodesprogramación?

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La biodesprogramación es una herramienta que mediante la aplicación e integración de diferentes técnicas, busca que la persona consultante tome conciencia del origen emocional de su conflicto, permitiendo así un entendimiento y comprensión que permitan gestionar e integrar de una forma diferente esas emociones, lo que por consecuencia lo llevará a alcanzar la sanación física y emocional que desea.

Así como lo demostró el Dr. Hamer, es necesario comprender que siempre antes de la aparición de un síntoma o malestar, que no siempre tiene que ser físico, la persona ha vivido una situación (o varias prolongadas en el tiempo) con una gran carga de estrés y que en biodesprogramación llamamos bioshock. Ese bioshock es un evento dramático, inesperado, vivido en soledad (sin poder expresarlo) y sin solución aparente para el individuo. 

En el caso de que sea físico, cada conflicto o síntoma tendrá un órgano relacionado en el que va a expresarse, siendo el cuerpo el único canal por el cual nuestro cerebro puede comunicarse y desde dónde el Acompañante en Biodesprogramación obtendrá información para comenzar la búsqueda de su origen. El objetivo es leer el síntoma o comportamiento e indagar para qué se está manifestando, ya que será la solución biológica más eficiente que nuestro cerebro inconsciente ha encontrado para solucionar aquello que la persona conscientemente es incapaz de resolver. 

No sólo los síntomas físicos pueden decodificarse, también se puede aplicar a un conflicto de relación, con el dinero, el trabajo, los accidentes, o lo que sea! ya que todo es producto y creación del propio cerebro inconsciente que va generando lo que se vive, condicionado totalmente por la manera que tiene de interpretar y percibir el entorno, ya que esa percepción se encuentra a su vez gobernada por la información biológica (epigenética) recibida de generaciones anteriores y que veremos más en detalle en otro artículo.

En una sesión de biodesprogramación la persona será guiada a través de sus emociones para poder encontrar el conflicto biológico (bioshock) que está afectando su presente. Para ello se aplicarán técnicas de hipnosis Erickssoniana, PNL (programación neurolingüística), psicogenealogía, psicomagia, meditación, ciclos biológicos memorizados, etc. todas ellas apoyadas y fundamentadas en las leyes biológicas que rigen nuestra especie y por consecuencia el funcionamiento de nuestro cuerpo y de su principal órgano de control que es el cerebro. La elección de una técnica u otra, dependerá de la información inicial con la que cuente el consultante y en función de ello se aplicará la que mejor se adapte a esas circunstancias y momento; aplicación que puede tener una duración relativa de entre 1 y 2 horas de sesión.

Es importante aclarar que la biodesprogramación no es ni suple ninguna práctica médica, psicológica o psiquiátrica, incluso se considera que puede ser complementaria a cualquier tipo de tratamiento ya que no interfiere con ninguno de ellos. Tampoco se dará ningún consejo ni se dirá que hacer al respecto, sólo se intenta hacer una descripción neutra de lo vivido para que el consultante resuelva según su libertad de elección. Tampoco existirá un acompañamiento posterior, ya que se busca no interferir con la voluntad y el tiempo que la persona necesita para resolver su conflicto, respetando así todos sus deseos. 

También es relevante entender, que la efectividad de la consulta es proporcional al conocimiento e interés que la persona posea sobre la biodesprogramación, ya que todo el poder de sanación se encuentra en su voluntad, el Acompañante en Biodesprogramación sólo proveerá la información que genere una nueva manera de ver lo sucedido, que le permita entender para qué sucedió y que al darse cuenta de eso, pueda solucionar su conflicto y así alcanzar su propia sanación.

Justamente por lo expuesto en el párrafo anterior, nadie debería mandar a otra persona a tomar una consulta de biodesprogramación, puede que se tengan las mejores intenciones, incluso creyendo que la otra persona lo necesita por algún motivo, pero si es así, quién lo está pensando es quién necesita la consulta.

DEBE EXISTIR INTERÉS, DESEO INTERIOR O CURIOSIDAD SOBRE LA BIODESPROGRAMACIÓN, SABER DE QUÉ SE TRATA, PARA QUE AL MOMENTO DE TOMAR LA SESIÓN DE CONSULTA PODER HACERLO EN TOTAL LIBERTAD Y ENCONTRARSE CON SU PROPIO SER PARA SANAR TODO AQUELLO DESEA.