Depresión

Se puede dividir en cuatro tipos:
1 – Depresión reactiva: a continuación de un acontecimiento traumático (duelo, divorcio, enfermedad, despido, etc.).
2 – Depresión endógena: sin causa exterior; el enfermo reconoce tener todo lo necesario para ser feliz, pero esto no le soluciona el problema.
3 – El baby blues de la joven después del parto (depresión posparto),
4 – La depresión estacionaria: invernal, frecuente en los países nórdicos.

Desde la Biodesprogramación observamos el síntoma como una solución biológica que el cerebro inconsciente ha elegido para resolver un conflicto que el individuo es incapaz de solucionar conscientemente. Si bien este síntoma puede tener muchas variantes y lo importante es revisar cada caso en particular aquí se van a explicar sus generalidades:
Podemos comparar la ‘Depresión’ con la ‘Ansiedad’ porque funcionan de forma similar e incluso a veces una puede venir acompañada de la otra. La ‘Depresión‘ pone atención excesiva en un conflicto pasado y la ‘Ansiedad’ pone atención excesiva en un conflicto futuro que se cree que puede suceder.
En el caso de la ‘Depresión’ la forma de interpretar el conflicto,estará influenciada por la lateralidad del individuo, es decir, si es zurdo o derecho, si está en un rol masculino o femenino (independientemente de su sexo biológico) ya que eso es determinado por el hemisferio cerebral dominante e influirá totalmente en la forma en que la persona percibe el ambiente (su territorio).
Si observamos la ‘Depresión’ (‘Baja presión’) como el resultado de lo que el cerebro propone como solución, el síntoma le sirve al individuo para ‘NO HACER’, físicamente la persona se siente sin energías, sin ganas y lo único que desea es estar encerrada, tirada en la cama o sin hacer nada. Eso nos da la pauta, de que el estrés que originó el síntoma fue vivido con FRUSTRACIÓN, es decir que en ese momento el individuo ‘NO SUPO QUÉ HACER O FUE IMPEDIDO’, entonces ahora su cerebro genera una ‘Depresión’ para que ya no se tenga que preocuparse POR HACER, la misma ‘Depresión’ no se lo permite y eso puede afectar su autoestima, que al no sentirse capaz, siente que no vale (desvalorización), entrando así en un círculo vicioso que retroalimenta más el síntoma.
Otro indicio es que esa FRUSTRACIÓN es vivida ante un conflicto de territorio, entendiendo como territorio a todo lo que la persona ama o considera suyo: MI casa, Mi padre, MI madre, MI trabajo, MI proyecto; MI pareja, etc. por lo que el conflicto tendrá como base una PÉRDIDA o SEPARACIÓN respecto a alguno de estos factores, o cuando el lugar que el individuo ocupaba es invadido, que sería lo mismo que PERDER su lugar.
Otro factor a observar, es la personalidad de quien padece este síntoma, es probable que tenga una actitud controladora, que esté atenta a que nada escape de su control, ya que desea que las cosas sean y se hagan a su manera, entonces cuando algo escapa a eso, fácilmente puede caer en la FRUSTRACIÓN, ya que su personalidad no le permite ACEPTAR otro resultado, incluso en algunos casos no le es posible ACEPTAR algo tan natural como la muerte de ser querido.
Es muy posible que el individuo que padece ‘Depresión’ haya vivido a lo largo de su vida varios eventos ‘de pérdidas frustrantes’ y por esa repetición es que el cerebro desencadena el síntoma’, por lo que será importante también identificar los eventos anteriores y así poder comprender mejor su origen.
En otros casos la ‘Depresión’ que el individuo siente es algo que ha estado ahí toda su vida, incluso en ocasiones no puede describir un momento de felicidad, por lo que habrá que buscar las PÉRDIDAS y la FRUSTRACIÓN en el ambiente emocional vivido por la madre durante la concepción, el embarazo o el parto (Proyecto y Sentido) y sino revisar el árbol familiar, ya que si se es doble de algún ancestro o quedaron duelos sin resolver, es posible que se estén repitiendo sus vivencias y emociones.

VARIANTES:

• Para la mujer zurda antes de la menopausia o la diestra en neutralización hormonal (menopausia, histerectomía, salto de cerebro afectivo a cerebro racional) o para el hombre zurdo en neutralización hormonal: Conflicto de territorio activo..
• Invariante biológico: Territorio + neutralización hormonal, atenúa la expresión física del conflicto, sentimiento de desvalorización y culpabilidad = síntoma.
• En el hombre: conflicto de desvalorización y culpabilidad.
• En la mujer: conflicto de frustración sexual enmascarada, en el que la sexualidad es vivida como un territorio («es mío»). Una mujer zurda entra en depresión apenas vive un conflicto sexual, un conflicto de territorio femenino.
• Es el signo de un drama profundo: «¿Cuál es el drama de tu vida?»
• Conflicto de desvalorización: «Estoy solo/a, a nadie le preocupo porque no valgo nada» + culpabilidad: «Es mi culpa porque yo tampoco hago nada para crear ese contacto con los demás» + territorio (lugar): «No
  puedo ocupar mi lugar».
• Depresión crónica: Insatisfacción permanente en relación con la familia.
• Depresión atmosférica: «Se me cae el cielo sobre la cabeza». Inhibición para la supervivencia, para no caer más bajo.
• Depresión catamenial: En relación con las reglas, con la condición femenina.
• Intento de suicidio: «No quieren que yo viva, pero renazco y vivo igual».
• Depresión y caída del cabello: conflicto de territorio vivido con una autoridad o una desvalorización intelectual.
• Sacrificarse por amor = renunciar a los propios deseos.

Ejemplo: Una mujer a sus 40 años comienza con depresión cuando muere su padre. Durante su vida había vivido varios eventos en los que se distanció físicamente de él, incluso sufrió mucho cuando sus padres se separaron y tuvo que ir vivir con su madre. En la sesión se encuentra que en su ‘Proyecto y Sentido’ la madre la tuvo con el propósito de ‘retener’ al padre, algo que para el inconsciente de la hija termina siendo una ley a cumplir. Esto hizo que a lo largo de su vida, ella viva con frustración cada momento en que se distanciaba de su padre, algo que vivió de forma repetida y que hace que su cerebro programe una depresión cuando finalmente su padre fallece, su muerte no le permite cumplir con el propósito de vida que su madre programó y esa frustración termina desencadenando una ‘Depresión’.

Si padeces de ‘Depresión’ hay que observar desde cuando, seguramente ahí encontrarás un evento de pérdida o separación vivenciado con frustración al no poder hacer nada al respecto e incluso puede haber eventos anteriores con las mismas características. Si no los encuentras dentro de tu propia vida, si tienes la posibilidad podrías indagar cómo fue la vida de mamá durante tu concepción, embarazo o parto, además de averiguar el propósito por el que te trajeron a la vida y si en algún momento estuvo la duda de que nacieras o no.
Descubrir el origen del síntoma sin dudas genera un cambio, que si además de forma consciente ACEPTO que NO CONTROLO NADA EN LA VIDA, que todo lo que sucede es así de perfecto y que lo vivido es una invitación de mi inconsciente a sanar algo que el clan familiar no ha podido resolver, puedo darme cuenta de que no perdido nada, de que nada me pertenece, que estamos aquí de paso, que vinimos sin nada y de la misma forma nos vamos a ir, comenzarás a poner atención en el presente cómo el único tesoro que nos da la vida y comenzarás a disfrutar cada momento. Si la ‘Depresión’ sirve para ‘no hacer’, para salir de allí puedes dar el primer paso y comenzar a hacer, ocuparte de ti y de disfrutar, tal vez en un principio requiera un esfuerzo de tu parte, pero de esa forma le estarás dando señales positivas a tu cerebro para sanar el síntoma.

IMPORTANTE: Lo expuesto aquí no es un diagnóstico, sino que son generalidades simbólicas que se utilizan en la búsqueda del conflicto, siempre con la participación del consultante, indagando en su historia personal para que tome consciencia de lo que está generando el síntoma o el comportamiento que desea sanar.

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