
La medicina describe el síntoma como un trastorno en la digestión por inflamación de la mucosa del estómago. Las sustancias químicas nocivas producen una agresión sobre la mucosa estomacal.
La gastritis aguda puede ser provocada por medicamentos (antiinflamatorios especialmente), alergia, estrés, agentes infecciosos, abuso de alcohol recientemente, ingesta de sustancias corrosivas, tratamientos radioterápicos. Los síntomas son los dolores gástricos no constantes (ardor estomacal).
La gastritis crónica está producida por agentes irritantes, especialmente el tabaco y el alcohol, por la ingesta de medicamentos antiinflamatorios o aun por fenómenos de autoinmunidad, como la enfermedad de Biermer. También puede producirla la presencia del germen Helicobacter pylori, que favorece la aparición de úlceras gastroduodenales y los cánceres gástricos. La gastritis crónica puede manifestarse con dolores, aunque a menudo es casi asintomática.
Desde la Biodesprogramación sabemos que el síntoma es una solución biológica que el cerebro inconsciente ha encontrado para resolver un conflicto emocional que el individuo conscientemente no puede. A diferencia de la medicina tradicional, creemos que el uso de sustancias puede influir en el síntoma pero no es el origen de su causa, así como tampoco lo son los microorganismos que aparecen en una etapa de reparación. Analizando la función del estómago, es el órgano que ACEPTA lo que ingresa al cuerpo, el alimento, sea real o emocional. Así que cuando aparece la gastritis es porque el individuo ha vivido un conflicto en su territorio de ‘No aceptar’ o ‘No poder digerir’, entonces se aumenta la producción de ácidos digestivos como una solución para potenciar la digestión y asimilar mejor este alimento. Como el alimento es simbólico o emocional, sólo habrá más ácido en el estómago y su potencia tendrá que ver con lo ‘indigesto’ o ‘inaceptable’ que se sienta el problema, a un punto tal de que la acidez puede dañar la mucosa intestinal y dar lugar a la aparición de úlceras.
Es común en individuos que viven la vida en términos de injusticia y esa perspectiva hace que en muchas ocasiones no puedan aceptar lo que su realidad les presenta. Es muy probable también que esos actos ‘injustos’ sean vivenciados con una autoridad, lo que en muchas ocasiones no permite la expresión de lo que realmente se siente (Ver autoridad en los progenitores).
VARIANTES:
- Incomprensión (EB).
- Conflicto de contrariedad indigesta en el territorio (CS). «Todo aquello que me irrita en el territorio» (EB).
- Cortado del padre (parte superior del tronco) por el cardias y el diafragma (EvdB).
Este síntoma viene a recordar lo inflexible que puedo ser ante las vivencias que se presentan en mi realidad, debemos entender de que no controlamos nada de lo que pasa fuera de nosotros, ni con otras personas, que el poder está en observar mis emociones, comprender la enseñanza que proponen y así poder cambiar mi realidad y sanar el cuerpo. Encontrar también en el árbol la autoridad con quién se vivieron las ‘injusticias’, te dará una pauta de por qué ahora te es difícil ‘aceptar’ lo que te parece ‘injusto’. Si se abandona la resistencia no habrá necesidad de producir ácidos digestivos en exceso, por ende tampoco habrá gastritis.
IMPORTANTE: Lo expuesto aquí no es un diagnóstico, sino que son generalidades simbólicas que se utilizan en la búsqueda del conflicto, siempre con la participación del consultante, indagando en su historia personal para que tome consciencia de lo que está generando el síntoma o el comportamiento que desea sanar.
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